Oración de la Infalibilidad
Tenemos conciencia, Señor Dios y Padre Divino, de aquello que enviaste a través de los Grandes Iniciados, como Rama, Orfeo, los 35 Budas, Hermes, Krishna, Zoroastro, Pitágoras;
Tenemos conciencia, Divina Causa Originaria, que a ser tiempo de Generalizar la Gracia de la Revelación Consoladora, enviaste a los Patriarcas Hebreos Tus Ángeles o Espíritus Mensajeros, prometiendo la Doctrina Integral, a ser completada por etapas, a lo largo de los milenios, según como Tus hijos hubiesen teniendo capacidad de asimilación;
Tenemos conciencia, Señor Absoluto, Espíritu y Verdad, Omnipresente, Omnisciente y Omnipotente, de aquello que hicieron Moisés, los Profetas, Jesús y los Apóstoles, no dijeron todo, pero apuntaron para las Promesas del Apocalipsis;
Tenemos conciencia, Señor, del aviso dejado por Jesús: “Aún tengo mucho para deciros, sin embargo vosotros no podéis suportarlo ahora”;
Tenemos conciencia, Sagrada Causa Originaria, de aquello que prometes en los capítulos 12, 14, 19, 21 y 22 del Apocalipsis, todo preparado con vistas al período llamado UN NUEVO CIELO Y UNA NUEVA TIERRA, a venir después de las terribles limpiezas al finalizar el segundo milenio;
Tenemos conciencia, Señor Absoluto, que la parte entregada hasta Jesús es Código de Comportamiento, por enseñar que los DIEZ MANDAMIENTOS deben ser vividos, y que el Verbo Ejemplar debe ser imitado, y que los Dones del Espíritu Santo, Carismas o Mediumnidades, deben merecer absoluto respeto, por ser los vehículos de la comunicabilidad de los Ángeles o Espíritus Mensajeros;
Tenemos conciencia, Señor y Padre Divino, que clerecías espurias a todo corrompieron, imponiendo dogmas estúpidos, rituales ridículos, vestes y gestos payasos, y prepotentes politiquerías sobre reyes, pueblos y naciones;
Tenemos conciencia, Divino Ser Omnipresente, que el finalizar del segundo milenio marcará tiempo inconfundible en la Humanidad, por aquello que prometes principalmente en los capítulos 12, 19 y 14, de Apocalipsis, con la entrega de EVANGELIO ETERNO, el Inconfundible Aviso Final;
Tenemos conciencia, Señor, de que los enemigos de Tu Doctrina serán desmigajados, aquí apelamos a Tus Legiones Angélicas o Mensajeras, para que nos defiendan contra los enemigos de la Verdad, del Amor y de la Virtud, sean encarnados o desencarnados;
Y como, Señor, nadie podrá DESABROCHAR EL DIOS INTERNO, fuera del CONOCIMIENTO DE LA VERDAD Y DE LA PRÁCTICA DEL BIEN, a Ti rogamos esta gracia: que hagamos menos largos, los discursos sobre el AMOR, y que pongamos todos nuestros esfuerzos al servicio de la humanitaria BONDAD!
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